El concepto de Artes Visuales se gesta a fines de la II Guerra Mundial, cuando los artistas europeos que habían emigrado a New York asientan una producción artística que se relaciona con la libertad expresiva y formal propiciada por las vanguardias de fines del S. XIX, a lo que se sumó el crucial empuje que significaron las propuestas de Marcel Duchamp. Pero es alrededor de 1980 cuando el término «Artes Visuales» empieza a predominar en el vocabulario, pues resulta más adecuado para el arte contemporáneo que la denominación «Artes Plásticas».
En las artes plásticas se entiende que cada una de las disciplinas, ya sea dibujo, grabado, escultura, pintura o fotografía, es un ámbito cerrado en sí mismo, con sus métodos y fronteras bien definidas. Cada una tiene su universo propio que dialoga levemente con los otros. En cambio, el arte desde la segunda mitad del S. XX en adelante, propone una vasta interacción; en principio esto se lleva a cabo integrando a la pintura o escultura, otros recursos y lenguajes diversos, tales como sonidos, escritura, imágenes en movimiento, etc. Esto naturalmente genera una amplia cantidad de formas posibles de hacer arte, ya que los criterios de producción y clasificación son más abiertos e integrados.
Los artistas visuales circulan normalmente por diversas áreas creativas: diseñan ambientes o instalaciones, crean actos teatrales efímeros o perfomances, luego se interesan en utilizar videos, imágenes de TV y medios digitales, experimentan integrando la escultura con la pintura o con la imagen en movimiento, recogen objetos y los utilizan estéticamente, intervienen fotografías, recurren a la música o a la luz, se alimentan del cómic, del imaginario popular y los medios de masas, o toman prestado elementos de la publicidad y el diseño. Y muchas veces, crean y diseñan la obra, pero otras personas las hacen.
Básicamente, las ideas que definen el Arte Visual son:
A) Apropiación, por parte del artista, de una cantidad ilimitada de recursos así como de estilos, incluso de siglos pasados (Renacimiento o Quattrocento, Barroco, Neoclasicismo, Romanticismo), los que son incorporados de modo innovador al interior de las composiciones.
B) Circulación y Experimentación, puesto que la gran mayoría de los artistas cuenta con una disciplina base, por ejemplo, pintura o fotografía, pero investiga otras disciplinas que puedan potenciar estéticamente su producción; ésta es vista entonces como una continuidad (basada en conceptos) que se presenta a través de diferentes soportes y materias.
C) Pluralismo y Globalización: tiene que ver con la fluida comunicación entre artistas de distintos países y continentes, facilitada por medios de comunicación como Internet, o por las cada vez más óptimas condiciones de viaje, traspaso de fronteras y emigración. El fenómeno de la globalización permite un enriquecimiento del lenguaje artístico, puesto que ingresan a la «escena internacional» artistas tercermundistas que aportan elementos estéticos de su propias culturas; así mismo, se produce una suerte de similitud general en el estilo: ya no se distingue una obra como característica de un país, y tampoco es relevante que así sea.
D) Estrategias Expositivas: tanto los artistas como los curadores buscan nuevas estrategias expositivas acordes a la naturaleza de las obras, creando exposiciones innovadoras en ideas, montaje y formatos. Experimentan con la ocupación de espacios públicos o sitios abandonados, la instalación de la muestra exclusivamente en Internet o en periódicos, y también con variaciones en la duración de la misma: desde pocas horas, hasta el clásico período de varias semanas o meses de exhibición.