Durante la última edad de hielo, la isla de Akimiski en la bahía de James, en Canadá, había quedado bajo enormes glaciares que presionaron hacia abajo con una fuerza inmensa. A medida que el clima cambió y se retiró el hielo, Akimiski comenzó una recuperación gradual. El lento pero constante aumento de altitud de la isla se registra a lo largo de sus bordes, terrazas naturales de la costa donde parecen estar grabados los anillos de la cuenca, resultado de la masa creciente y la acción de las olas en el mar. (Foto: USGS / NASA)